Agricultura, ganadería y turismo masivo son las principales amenazas de los humedales en México, consideró Pedro Ramírez García Armora, del Instituto de Biología (IB).
Estudios (2019) señalan que el país cuenta con seis mil 331 complejos de humedales, de los cuales 142 son considerados de importancia internacional; sin embargo, a la fecha se ha perdido el 62 por ciento.
En todo el país hay 183 reservas protegidas y otras que tiene mecanismo de cuidado y en vías de ser declaradas protegidas. Mientras que en Yucatán son nueve zonas de reserva protegida.
De las 142 zonas de importancia internacional mencionadas con que cuenta nuestro país, equivalentes a una superficie total de ocho millones 657 mil 57 hectáreas, 80 se relacionan con 69 áreas naturales protegidas de carácter federal; se trata de una de las naciones con más “sitios Ramsar” (nombre que refiere a la ciudad iraní donde se firmó la Convención sobre los Humedales, en 1971).
la contaminación y el uso de herbicidas, insecticidas y nutrientes artificiales que se utilizan para favorecer cultivos, además de la deforestación y el cambio climático que ocasiona diversos fenómenos como deshielos, asolvamiento de humedales y, en general, el aumento del nivel del mar, se suman a la problemática que amenaza los humedales.
Beneficios de los humedales
Los servicios ambientales que prestan estos ecosistemas son innumerables; son el hogar para infinidad de especies de flora y fauna, funcionan como vasos reguladores y así evitan las inundaciones; además, filtran el agua que llega al manto freático. De igual manera, ofrecen alimentos mediante la caza y la pesca, y hasta materiales para construcción. También son de relevancia para el sector turismo, señaló el académico.
Asimismo, son “trampas” de materia orgánica y contribuyen a la formación de suelo, y frente al cambio climático, sobre todo los manglares, marismas y praderas de pastos marinos, coadyuvan a la captura de carbono, que de ese modo ya no alcanza a la atmósfera; “secuestran” bióxido de carbono hasta 55 veces más rápido que los bosques tropicales. También juegan un papel importante en la disponibilidad de agua dulce.
Prestan servicios inigualables de mitigación del cambio climático y adaptación a éste, biodiversidad y salud humana, por un valor de más de 47.4 billones de dólares al año, y su degradación supone un riesgo para la vida y los medios de subsistencia del ser humano, recalca la Convención a propósito de la publicación del documento La nueva perspectiva mundial sobre los humedales: Edición especial de 2021.
Con información de Gaceta UNAM